Foto:Palmira Escobar Martos |
Participó de la actividad escolar conjunta
sobre la Prehistoria en el aula didáctica del Neolítico. En el
Centro de Iniciativa Rural Monte Areo en El Valle de Carreño
acompañó al alumnado de la escuela de Llorgozana y de la de
Guimarán – El Valle.
Barbón conoció, de primera mano, los
proyectos educativos singulares que en sus escuelas rurales se vienen
desarrollando como el de “Carreño Concejo Cardioprotegido”. En
dicho proyecto, con la colaboración del médico Vicente González,
enseñaron al a población escolar del municipio a actuar ante una
parada cardiaca o un atragantamiento. El candidato a la Presidencia
del Principado fue agasajado con un DVD resumen de la iniciativa.
Seguidamente visitó equipamientos municipales
construidos por gobiernos socialistas para fomentar el desarrollo
rural, la participación y contribuir al bienestar de las personas
que habitan en el medio rural. Equipamientos municipales, como los
denominados Centros de Iniciativa Rural, que con fórmulas de gestión
público privada, dan servicios al vecindario de las zonas y crean
empleo autónomo. En el transcurso de la visita departió con el
vecindario de la zona.
Concluyó la jornada matinal con una visita al
Monte Areo que alberga la necrópolis mayor de Asturias y
una de las mayores de España con la existencia de
elementos funerarios con una antigüedad de cinco mil a tres mil años
en el caso de los dólmenes.
En la actualidad existen cerca de
treinta túmulos funerarios del Neolítico repartidos
por la mitad de la ladera y la cima, en dos zonas denominadas Cierru
Los Llanos y Les Güelgues de San Pablo. Recorrió, acompañado de la
Alcaldesa, Amelia Fernández, los restos arqueológicos más
destacables las dos cámaras funerarias cuya planta es cuadrada y un
dolmen de planta trapezoidal.
La Necrópolis megalítica del Monte Areo está
catalogada como Bien de Interés Cultural desde 1997 y
en dicha zona, dirigió las excavaciones y las labores arqueológicas
de investigación un equipo perteneciente al departamento de
Prehistoria y Arqueología de la Universidad de Oviedo, bajo la
supervisión de Miguel Ángel de Blas Cortina, catedrático de dicha
universidad.
Foto:Palmira Escobar Martos |
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